Un poco de nostalgia

...fue lo que me agarró la semana pasada cuando salí del trabajo y me encontré con que había olor a HUMO. Hubo un alog en mi interior que con ojos llorosos me recordó los eventos pasados, la ciudad llena de humo. Y a todos esto los ojos llorosos no eran de la particular emoción que sentía en ese momento, si no una mezla entre ardor por culpa del humo y tristeza.

Señoras y señores, tristeza es la palabra que leyeron y tristeza es lo que estoy sintiendo ultimamente. Y esto ya trasciende los límites de Buenos Aires. El país completo se ve envuelto en una situación que, estés de acuerdo con quien estés de acuerdo ya es insostenible. Para utilizar una expresión pronta, guarra y de baja moral, 'me tienen los huvos al plato'.

Pero, como siempre algo bueno sale de todo esto. Algo bueno sale de todos lados. Y si no sale, hagámoslo salir a la fuerza. Es por eso que recordé que una mañana yendo al trabajo había sacado estas fotos de la ciudad inundada por el humo. Ese día por un segundo creí que era aún otra estúpida estrategia para parecernos más a Europa. Quizá si nos convertíamos en un Londres tercermundista nuestra urbe cobraba interés internacional.

Sea lo que fuere, acá están las fotos que había prometido.









Lo último que quiero agregar, es que durante esa época la revista Barcelona publicó una tapa que me hizo reir demasiado. Decía 'Nerón Vuelve, el plan secreto para prender fuego la ciudad y llenar de humo el campo' (la pueden encontrar en la página de la revista, es del día 25 de Abril de 2008).

¿Alguna vez desarrollaremos un sentimiento de nacionalidad? Mejor dicho ¿Desarrollaremos un sentimiento de unidad nacional?

Keep on dreaming Buenos Aires.